Día 2

Rabat es una ciudad elegante, ya que ha sido la capital de Marruecos y la residencia oficial del rey desde principios del siglo XX. Sin embargo, esta capital mantiene un carácter tradicional marroquí como todas las ciudades históricas del país. Nuestro recorrido por la mañana comienza con la fortificada Kasbah Oudaya, que incluye la residencia real del siglo XVII y su jardín de estilo andaluz. Mausoleo de Mohamed V, obra maestra del arte y la artesanía marroquí junto al cual se alza la torre medieval Hassan construida a finales del siglo XII. Dejamos Rabat y nos dirigimos tierra adentro a la ciudad de Meknes, que sirvió como capital de Marruecos en el siglo XVII para el sultán Moulay Ismail. Este rey tenía la reputación de ser un guerrero despiadado, pero también era un constructor, ya que durante su reinado de 55 años, convirtió a Meknes de una pequeña ciudad en una capital majestuosa con murallas gigantes, puertas monumentales, palacios y más de 15 millas de muros exteriores. . Nuestro líder turístico nos llevará a realizar un recorrido completo por los puntos destacados de la ciudad, como los impresionantes graneros y establos construidos por el Sultán para su caballería, el Mausoleo del Rey ubicado dentro de una mezquita hermosamente construida, la puerta monumental de Bab El Mansour dominando la plaza El Hedim y el colorido mercado de abastos. Por la tarde daremos un paseo por un hermoso paisaje hasta el sitio arqueológico de Volubilis, la mayor de las colonias romanas establecidas en Marruecos entre los siglos I y II d.C. Seremos guiados a través de este sitio Patrimonio de la Humanidad cuyas ruinas excavadas destacan especialmente por sus asombrosos mosaicos coloridos y restos de monumentos romanos como la Basílica, el Templo y el Arco del Triunfo. Al final de la tarde nos dirigiremos a la ciudad de Fez para registrarnos en nuestro hotel.